Friday, June 17, 2005

Leviatán

¿Cómo es -me preguntaba anoche
un poeta- que las mujeres saben?
Siempre saben, a veces me da bronca.

Murmuré algo sobre la función materna,
fantasmas; palabras de tierra firme.
No le conté el secreto:

no le dije que el sentido es un gran pez
en el centro del mar, una enorme criatura
de cuya existencia se habla, pero que nadie ha visto

salvo nosotras cuando las preguntas de los hijos
o cuando nuestra propia curiosidad -que es mucha-
nos impele a arponearlo por extrañas aguas nocturnas

de las que no sabemos si vamos a volver hablando
sensatamente, o balbuceando hasta morir.